domingo, 20 de julio de 2008

El andén

El desolado paisaje en la estación, es la fina estampa de que el tren acaba de pasar; un cigarrillo el piso, aun humeante me lo confirma. Es el instante en el que el andén se asimila a la muerte, frío y silencioso. El puesto de diarios permanece abierto; el borracho con sus horas bebidas busca alguna moneda perdida, mientras fuma el cigarrillo que levanto del suelo.
La mente divaga y llega a pensar extrañezas, al tiempo que comienza a arrimarse gente bajo el techo de madera con estilo ingles, iluminado por luces celestes y parpadeantes. El banco, con un travesaño de hierro por respaldo, se torna algo incomodo, y claro, entre cuatro bancos disponibles yo tenía que sentarme en el que esta en peor estado.
El murmullo ya ganó lugar y el tren vecino recogió a la gente de enfrente. Caras raras que se mueven sin sombra; almas extrañas que no se volverán a ver o al menos no se reconocerán. Si hay luna no lo sé, las estrellas que brillan desde acá abajo no se ven; no hay pájaros, no hay perros.
Infinito paisaje de estación, foto móvil y repetida, común del noche a noche, para el que perdió el tren y debe esperar al ultimo.

D.A.D.
31 de marzo de 2005
23:49hs.
(Justito antes que llegue el tren)

1 comentario:

Anónimo dijo...

qué lindo que hayas actualizado!! :)
me gusto mucho, como todo lo que escribis en el Blog ( sin contar los chistes malos del flog jeje).
me encantaron dos fragmentos: "Es el instante en el que el andén se asimila a la muerte, frío y silencioso" es uno y el otro: "Infinito paisaje de estación, foto móvil y repetida, común del noche a noche, para el que perdió el tren y debe esperar al ultimo." ah y también este otro:"Caras raras que se mueven sin sombra; almas extrañas que no se volverán a ver o al menos no se reconocerán."
Eso es sensibilidad para percibir lo que pasa a muestro alrededor y habilidad para poder expresarlo, en definitiva es lo que se suele llamar sensibilidad poética...