Cantaba una estrella mientras llegaba,
fría y en calma, la claridad del alba.
Se apagaba su tenue sonrisa
al ver irse como la brisa
a la claridad que la protegía.
Sin reparo y sin consuelo lloraba
dolorida por el canto del silencio.
Era tarde, su brillo se desvanecía.
Despareció, al sonar de la inmensa luz
que surca el cielo azul
y marca el paso de las horas.
Un poeta humilde la vio partir
fue una mañana fría de abril.
Cuentan que nunca más volvió a escribir.
DaD. – 22 de junio de 2007
2 comentarios:
TE ALENTARE DONDE SEA LO UNICO QUE QUIERO ES VER A TIGRE CAMPEON ES VER A TIGRE EN PRIMERAAAAAAAAAA!!
La verdad es q el poema, esta bueno no lo niego jaja, pero lo q rebalsa en este momento es la poesia de que tuvo lazzaro para elevarse y con una esquisita chilena clavar ese golazo que representa la ilusion de 20000 almas que coparon el estadio monumental de victoria y de miles mas que no fueron esa esperanza de estar a noventa minutos.
TIGRE CORAZON! TIGRE CORAZON (l)
la última frase, es muy calamaro o sabina ...
besos
juli*
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